El sector corchero puede ser un ejemplo a seguir a la hora de ayudar a mitigar el impacto de grandes retos globales como son la crisis climática o la crisis causada por la pandemia COVID-19. Ésta fue una de las tesis que el director de la Fundación Instituto Catalán del Corcho, Albert Hereu, trasladó a las jornadas virtuales interactivas de negocios "The Future of Wine", celebradas los pasados 26 y 27 de noviembre.
El cambio climático y el corcho
Preguntado sobre cómo afrontar la crisis climática, Albert Hereu afirmó que “es evidente que si los consumidores y la sociedad en general son cada vez más conscientes de la emergencia climática en la que nos encontramos, debemos ofrecerles productos que no sólo no contaminen, sino que también ayuden a mitigar los retos a los que nos enfrentamos”. Y es que diferentes estudios demuestran que un tapón de corcho puede retener más de 500 gramos de CO2, cuando una botella de cristal estándar libera aproximadamente 400 gramos de CO2 para su producción. En este sentido, Hereu aseguró que el sector corchero “es un claro ejemplo de modelo económico regenerativo porque aporta valor a la sociedad y al medio ambiente mediante actividades que promueven la captura de CO2, el mantenimiento de los hábitats forestales y la revitalización socioeconómica de las zonas rurales”. Si pensamos a nivel mundial, hay 2,1 millones de hectáreas de bosque corchero en todo el mundo y se producen 12.000 millones de tapones de corcho anuales. "Si tomamos una retención media de 300 gramos por tapón de corcho, sería una retención global equivalente a 3,6 millones de toneladas de CO2 por año", afirmó Hereu.
Una economía más inclusiva y sostenible
El director de la Fundación Instituto Catalán del Corcho aseguró que tanto la emergencia climática como la crisis social y económica causada por el COVID-19 muestran la necesidad de transitar hacia un modelo económico más inclusivo, equitativo, socialmente justo y sostenible, que no busque maximizar los beneficios económicos a cualquier precio.
En este sentido, la Fundación Instituto Catalán del Corcho ha comenzado un proceso de contabilización del valor social aportado a nuestro entorno y de evaluación de la contribución de sus actividades al bien común. "Debemos situar las preocupaciones sociales y ambientales en el centro de nuestro modelo de negocio, priorizando el impacto social y ambiental sobre la maximización de los beneficios".
The Future of Wine
The Future of Wine es una conferencia internacional del sector vitivinícola que quiere abrir debate y resolver el reto de cómo la industria del vino puede responder a las presiones de la sostenibilidad y crear oportunidad de negocio. En esta edición hubo aproximadamente 700 personas inscritas de todo el mundo. Entre los ponentes, además del Director de la Fundación, participaron los máximos responsables de entidades como TESCO, Marks & Spencer, XistoWines, Cadena Zapata, Raeburn Fine Wines, BSI, Snowden Vineyards, DIAM, Vina Santa Rita, Emetry, Smith Haut Lafitte, Chakana Winery, Smith HautLafitte, Castello di Brolio, Raimat, ISEAL Alliance, Vingruppen y Norden, AlkoInc, ChateauLéoube, ConoSur, Torres, Tablas Creek, MW, Wanderlust Wine, Unilever, Chateau George 7, Toro,Enotria&Coe, Davenport Vineyards o Fairtra de Africa Southern Africa Newwork.
Hereu participó en una conferencia titulada “Lecciones desde España: Cómo la industria del vino puede afrontar la sostenibilidad y el cambio climático” donde compartió espacio de diálogo con Marta Terrado, especialista en comunicación científica en el Barcelona Supercomputing Center y con Joan Esteve , director de la Bodega Raimat.